La circulación de la sangre.
William Harvey (1578 – 1657) había observado pacientemente la acción del corazón y de la sangre. A cada
contracción el corazón bombeaba cierta cantidad de sangre en las arterias. Al cabo de una hora había
bombeado una cantidad...
More
La circulación de la sangre.
William Harvey (1578 – 1657) había observado pacientemente la acción del corazón y de la sangre. A cada
contracción el corazón bombeaba cierta cantidad de sangre en las arterias. Al cabo de una hora había
bombeado una cantidad que pesaba tres veces más que un hombre. ¿De dónde venía toda esa sangre? ¿A
dónde iba? ¿Venía de la nada?
A Harvey sólo se le ocurría una respuesta: La sangre que salía del corazón tenía que volver a él. La sangre
tenía que circular por el cuerpo.
Galeno, el gran médico griego del siglo III d.C., pensaba que la sangre iba y venía suavemente por las
arterias y pasaba a través de orificios invisibles en la pared que dividía el corazón en dos mitades. La sangre
iba primero en una dirección, luego en la contraria. La teoría de Galeno subsistió durante mil cuatrocientos
años.
Harvey estudió el corazón en animales vivos y observó que las dos mitades no se contraían al mismo
tiempo. Estudió las válvulas que se hallan entre los ventrículos y
Less